La guerra en Ucrania, los cambios geopolíticos, la inflación y la inestabilidad del precio del dólar han puesto una pregunta en el panorama: ¿2023 traerá una recesión global?
Según la encuesta “Chief Economist Outlook 2023”, publicada en septiembre de 2022 por el Foro Económico Mundial, 64% de los expertos consideran esta opción como un poco probable.
Foro Económico Mundial
Esto, a pesar de que las proyecciones económicas a nivel mundial son moderadas.
Esto significa que economías tradicionalmente fuertes como la estadounidense o la europea no crecerán al ritmo acostumbrado, pero frente a otras potencias como China, las proyecciones son más optimistas.
Por esto, 59% de los expertos espera un crecimiento económico débil en Europa en 2023, el 9% espera un crecimiento moderado y solo un 5% proyecta uno fuerte.
Con respecto a Estados Unidos, más de la mitad (55%) espera un crecimiento económico débil y el 32% uno moderado, frente a las cifras más alentadoras de 2022, cuando los porcentajes eran de 36 y 59% respectivamente.
Con respecto a China, son más optimistas: la mayoría pronostica un crecimiento moderado (59%) o fuerte (14%).
Latinoamérica y el Caribe tiene perspectivas menos alentadoras: según los expertos consultados por el WEF, el 71% proyecta un crecimiento débil y solo el 24% proyecta un crecimiento económico moderado en la región.
Inflación: un factor influyente
La inflación es uno de los temas centrales de conversación para los expertos y los ciudadanos en general.
Según el WEF, una de las causas de las débiles perspectivas de crecimiento a nivel global son las elevadas tasas de inflación, que han provocado movimientos monetarios fuertes para tratar de frenar los precios y restablecer la credibilidad a medio plazo.
A pesar de esto, las proyecciones sobre este ítem tienden a ser altas.
Por ejemplo, el 52% de los encuestados proyecta una inflación moderada y el 43% una alta en Estados Unidos.
En Europa, las proyecciones están empatadas: 47% de los expertos pronostican una inflación moderada y el mismo número pronostica una inflación alta. Esto, sin embargo, es una proyección más alentadora que la de 2022, cuando el 93% esperaba una inflación alta.
Con respecto a China, 61% de los expertos pronostica una inflación moderada frente al 11% que señala como posible una inflación alta. Estas cifras no difieren tanto de las de 2022, cuando los pronósticos eran de 58 y 21% respectivamente.
Latinoamérica y el Caribe tienen proyecciones menos optimistas: más de la mitad (59%) de los expertos espera una inflación alta y solo el 35% se decanta por una moderada. Sin embargo, estas proyecciones son mejores que las de 2022, cuando el 86% esperaba una inflación alta y solo el 14% una moderada.
Los expertos mantienen pronósticos más bien optimistas para otras economías, como la de Oriente Medio y el Norte de África (MENA) en 2023, en donde se espera un crecimiento moderado o mejor, pero en proporción se espera un crecimiento fuerte o muy fuerte (del 47% al 12%). Esto responde al fuerte año que han disfrutado los exportadores energéticos de la región.
En conclusión: aunque los pronósticos son generalmente reservados, las proyecciones de crecimiento económico en 2023 hacen ver como poco probable una recesión que afecte a todas las regiones. Habrá que esperar para ver si el impulso de nuevas tecnologías y las discusiones sobre transición energética logran inclinar la balanza de manera favorable para empresarios y emprendedores de alto impacto.