¡Bienvenidos al episodio más crudo y real de Innovation Land Podcast!
Aquí no vinimos a pintar el emprendimiento como un arcoíris de unicornios ni a endulzar la narrativa del éxito.
Hoy nos sentamos con tres titanes del juego que soltaron la sopa sobre lo que de verdad pasa cuando te lanzas al ruedo: Manuela Villegas, la dura de Sí Señor; Andrés Raigosa , el cerebro tras la Cámara de Aceleración y Emprendimiento de la ANDI; y Pepe Villatoro, el crack global de Fuckup Nights.
¿El tema? Fracaso, salud mental y esa montaña rusa emocional que es emprender en un mundo que te exige éxito 24/7. Spoiler alert: ser emprendedor no es para débiles de corazón.
Vamos por partes, porque esto estuvo cargado de verdades como puños. Arrancamos con Andrés poniéndonos en contexto, presentando a los invitados y soltando las primeras bombas. Manuela, con esa energía que la caracteriza, dejó claro que en la publicidad latinoamericana alguien tenía que poner orden, y decidió ser ella.
¿Cómo? Trayendo el tecnicismo de vuelta y pateando esa manía de improvisar en marketing como si fuera un hobby. Pero lo más brutal llegó cuando contó que cometió un error con un cliente, y no solo devolvió el dinero, sino que lo publicó en redes sociales para mostrar que ser transparente no te mata, te hace más grande. Así se gana el respeto en un ecosistema donde nadie quiere admitir cuando la caga.
Luego vino Pepe, el tipo que convirtió los fracasos en espectáculos globales. Sí, estamos hablando de Fuckup Nights, ese movimiento que arrancó como un parche entre amigos para contar sus peores historias de negocios y terminó conectando a más de 250 ciudades en todo el mundo.
La filosofía de Pepe es sencilla y demoledora: si no hablas de tus caídas, ¿qué estás aprendiendo realmente? Porque las lecciones no están en los éxitos maquillados de Instagram, sino en los madrazos que te pone la vida.
Y aquí viene lo heavy
el fracaso no es lo único que acecha a los emprendedores. La salud mental es un tema del que pocos hablan, pero que pesa como una roca. Según un estudio mencionado en el episodio, el 72% de los emprendedores enfrenta problemas de salud mental, y las cifras de pensamientos suicidas son alarmantes. Manuela abrió su corazón y nos contó su propia lucha contra la depresión, un monstruo que no discrimina por el tamaño de tu éxito.
¿Su solución? Implementar un terapeuta interno en su empresa, porque un equipo feliz es un equipo que la rompe. Pepe sumó a la conversación señalando cómo las Fuckup Nights no solo son catárticas para el público, sino para los mismos oradores, que encuentran alivio al soltar sus historias más oscuras.
El cierre fue pura poesía del emprendimiento real
normalicemos las caídas, las luchas y los días en los que no podemos más. Dejemos de glorificar el “hustle culture” y empecemos a hablar de lo que realmente importa: ser humanos, vulnerables y abiertos a construir comunidad a través de nuestras experiencias.
Este episodio fue un bofetón de realidad para todos los que todavía creen que emprender es un camino lleno de aplausos y finales felices.
Así que si quieres un reality check brutal y honesto, dale play a este episodio.